Llevo ya un rato pensando qué hacer con mi crónica de hoy... la que tenía que ser mi crónica sobre mi primera carrera seria y describir mi primera pequeña hazaña, la primera de muchas.
No ha podido ser.
Hoy, se suponía que me levantaba a las 7 para llegar a las 8:30, recoger dorsal y participar en la última carrera del Circuito Divina Pastora de Valencia. A las 9 empezaba la carrera.
Tengo que decir que a fecha de hoy nunca había atesorado ninguna prenda de ropa o accesorio, quizá cuando era adolescente y demás... pero hacía tiempo que no miraba con ilusión una prenda de vestir o un complemento, con los años han perdido la importancia para mí.
Esto ha pasado a la historia al adquirir las zapatillas nuevas (podéis ver la experiencia de comprarlas en el post anterior). Ya me parecían extremadamente bonitas pero al probarlas, creo que ha sido un cambio significativo en mis "paseillos".
Por fin me he comprado unas zapatillas pijas, que digo yo, de esas que tienen 20 colorines, sistemas de amortiguación, drop, waffle y nosecuantas tonterías más. Lo siento pero este no es uno de esos blogs donde la opinión es técnica.
Lo más desconcertante de ir sólo con el cronómetro era que no sabía muy bien cuánta distancia hacía o si mis tiempos eran buenos o no. En parte era feliz así.
De hecho, las primeras semanas estaba maravillada con el simple hecho de aguantar corriendo más de 10 minutos, y eso me sigue pasando.
Ahora bien, cuando me apunté a la 6k Divina Pastora algo hizo click en mi cabeza. Más bien mi amiga diciéndome "estamos a 7min/km eso es mucho".
Hay que ver, 2 meses quejándonos que no llega el frío y ahora que viene a quejarnos también. Si es que mucho running pero quejarse es el deporte nacional, eso es así.
Bueno pues decidida a no desmotivarme con estos aires gélidos que amenazan con expropiarme las orejillas... hoy me he desplazado a Decathlon para proveerme de ropa y seguir con mi rutina de 3 días por semana sin morir congelada.
Tras leer en varios sitios acerca de la importancia suprema y adoración por los pulsómetros, decidí que era hora de empezar a ver cómo podía ayudarme a la hora de rendir más y no pasarme de lista cuando no deba.